No me gusta colgarme medallas de artista, pero sí sus defectos. Tal vez porque me interese más la vida oscura del artista que su brillante y exitosa cara. Y me interesa porque en ella se esconde el detonante de toda la pasión, el motivo por el cual el artista se decide a crear. Yo no soy un artista –siempre he sido aprendiz de todo y maestro de nada-, pero sí reconozco en mi personalidad los rasgos patológicos de una persona entregada al arte. Podría decirse que me falta el talento y me sobra el temperamento.
Paso noches en vela pensando fantasías que sólo me llevan al amanecer con los ojos rojos y el alma cansada. Tengo cambios de humor constantes. Cualquier problema es un dilema moral y metafísico. Me hundo y salgo a flote en cuestión de horas. Fanfarroneo y necesito una constante aprobación de todo cuanto hago. Y se me cae el ánimo a los pies si no soy capaz de expresar lo que necesito decir. Todo este desastre existencial se debe a un diálogo interno que siempre termina en bronca y sin una solución acertada.
No obstante, siempre tiene que haber una chispa que encienda esa guerra interior que me pone en marcha y me hace escribir. Seguramente mi calidad intelectual no es la esperada y mis intereses sociales no consiguen motivarme lo suficiente. Por ello no suelo escribir acerca de los terribles envites que sufre el mundo. Todas las guerras, las muertes, el hambre y la injusticia me conmueven, me estremecen, pero no me sientan frente al teclado. Es posible que lo consigan las emociones que me provocan, pero no el hecho en sí.
He pensado mucho en ello y no sé si achacarlo al egoísmo –muy compatible con mi temperamento artístico-, al egocentrismo o a la autocompasión. Esto último me resulta absolutamente repugnante, así que me quedo con cualquiera de las dos primeras. En mí, la chispa suele venir de la inspiración y la inspiración viene de las musas. Sí, lo sé, suena místico, ñoño y hasta cretinesco, pero es la pura verdad.
¿Y qué son las musas? Pues bien, eso depende del carácter del artista. Si el artista es un tipo jovial y triunfador, las musas serán todas aquellas personas del sexo contrario – o no- que le inspiran las obras que crea. Y esas obras, dada la condición del artista, serán igualmente alegres y autocomplacientes. Así que probablemente se le tache de superficial o banal y se le olvide o no se le tenga la debida consideración. Porque parece que un artista debe ser un tipo atormentado, taciturno, amargado por lo único que le ha dado la espalda y despreciativo con el resto de sus triunfos.
En este ideal de artista amargado cabe algún tipo de drogadicción y desde luego la chulería, la prepotencia y la aparente sobrevaloración para esconder todo lo contrario. En verdad, esa persona tan impresentable lo único que intenta es autodestruirse porque se odia –con mayor o menor intensidad- y se siente un fracasado, aunque sea un triunfador. Esta sensación va y viene y, de vez en cuando, surgen atisbos de humanidad y muestra dudas o inseguridades. Pues todo lo que hace lo hace para satisfacer a una musa que no está sedienta de su arte. Quizá lo aprecie, tal vez lo considere, pero, desde luego, no se atreve a entenderlo.
Y es que ser musa tampoco debe resultar sencillo. Bien mirado, que un tipo insoportable y autodestructivo esté obsesionado contigo hasta el punto de consagrarte su talento no resulta ni tranquilizador, ni cómodo. Pero, ¿qué sucedería si por un momento la musa se deja querer, si corresponde al interesado y aprecia, no sólo el arte, sino al artista? Y no como artista, sino como persona. No sé qué pasaría, pero por aventurar podrían pasar tres cosas: la primera, que su arte se tornase luminoso y nítido, manteniendo la calidad y la pasión; la segunda, que como es propio de la condición humana perdiera el interés por su musa, una vez descendida de los altares, y se buscase a otra más inalcanzable. O, la tercera, que directamente no encontrase esa chispa y se sintiese perdido al no tener la necesidad de crear.
En cualquier caso, lo que parece es que un artista es un ser siempre insatisfecho que, de una u otra manera, acabará teniendo que decidir entre su felicidad y su arte. Y no hay felicidad sin arte, pero sí arte sin felicidad.
ARTISTA!!!!!!!
ResponderEliminarNo hay felicidad sin arte?Será en el caso del artista...
CrIssssssssss
Claro que es en el caso del artista. Gracias por la parte que me toca. Y por leerme.
ResponderEliminarTe pareces al Guido de Fellini
ResponderEliminarY como él, al final, he descubierto que la felicidad sí es compatible con el arte -aunque yo no sea artista-. Voy aprendiendo a vivir y a escribir: a conjugar esos dos verbos en la misma columna como uno solo. Y no me va nada mal. Gracias por leerme.
ResponderEliminarQué germánico te leo, Nacho!
ResponderEliminar...ehhh... La Tercera!! La Tercera siempre mola más!
Marco.
Con la República, vale, Marco. Pero, en este caso, me quedo con la primera de largo. Me alegra mucho verte por aquí.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pense que la melancolia no se curaba, bueno si.
ResponderEliminarQue sorpresa la mia.
Creo yo, que conectamos como podemos, y en esa busqueda desesperada, en ese vaciar necesitado, sale... sale solo... y sin querer queriendo, una entrada en el blog, un cuadro, una cancion.
Hay otras maneras de conectar, un poco mas sanas y mas respetuosas para con uno y para con los demas... mas evolucionadas. Ese camino, no exento de dolor, lo que es genial porque con abstinencia total no podria sostener, aprendo. Nada mas, ni nada menos. Aprendo a que? A abrir, a escucharme, a sanar, a recibir, a dar. La diferencia aca, entre "sufrir por sufrir" y "sufrir y que al menos valga la pena", es que hay direccion. Si hay direccion, uno no se pierde tanto. La sensibilidad y la creatividad, siguen estando ... temi alguna vez que eso se extinga a medida que me fui alejando de la sombra, pero no ocurrio. Al contrario, mi arte se esta limpiando, es mas dulce, mas amable, mas sabio y sigue conmoviendo a quien se deja tocar. Este camino direccionado, como yo lo llamo, si es sincero, entregado y profundo, es musa y balsamo. Respirar, trabajar con el cuerpo, con las raices, con los pies, escucharse, y todo lo demas. Esas cosas, esa informacion que todos tenemos bien adentro, en el fondo y en el centro... pero que nos cuesta tanto recordar.
pd: hoy fuiste mi musa
Gracias...
ResponderEliminarEs verdad...y sin muso, aunque pintes sin parar, luminoso ... lo demás no tiene sentido, no se siente la vida ... los árboles se pierden en el cielo... y luchas por estar aquí, por dejarte cuerd@ porque sino como das ese salto de estar depre por que la sociedad esta defectuosa y te da flojera convivir con ellos (sin ofender) y con que cara encuentras entonces a un verdadero muso como el que mencionas, ese que te acompaña, te da fuerza, da estabilidad y dejas tu lado oscuro, para solo disfrutar la compañía de los demás, aún la misma aburrida sociedad.
Porque me atrevo a decirles así, porque es triste, no encajar, cuando los escucho criticarse sin pasar a otro tema, quejarse sin decir que más da si no fuiste de viaje por décima vez este año... cuando pasan los días y sigues en tu misma frecuencia de juzgarme porque crees que quiero llamar tu atención cuando lo único que estoy haciendo es vivir !!!!! y mientras más feliz y contenta más te admiran o te critícan de todo y de nada, si un día saltas estas loco, si al otro dejas de vestir como ellos ! esta queriendo llamar la atención ... malestares que gritan en silencio cuando sale de mi vida mi muso...
de verdad dejo mi cordura por un hombre socialmente reconocido y me pierdo en la vida y me siento morir, porque no quiero estar sintiéndo esto esta aburridísimo y no quiero saltar a la loca vida solitaria en una cabaña o un departamento transformándome en una hermitaña citadina como algunos amigos investigadores o científicos hacen en silencio. Viven dos vidas, la de su trabajo de buen puesto Universitario como investigadores y la de su genio encerrado porque no toleran la estupidez del mundo vacío enrolado en que diras tu de mi, que dire yo de ti, que harás con ese dinero ?!
Hoy es uno de esos momentos, en los que le ruego a el creador de mi existencia y la de todos, no estoy loca ni depre, le digo ... uf cuantos días más de vida? Yo, no quiero seguir aquí.
Mi arte, muy luminoso. ok... mi vida, muy cambiante.
Mis sueños muy desvanecidos, mi felicidad establecida en diferentes momentos, cuando escucho las toronjas caer en la noche, cuando veo a mi golden venir a decirme no desistas, aquí estoy contigo. Cuando escucho las risas de los peques en el colegio que esta al otro lado de la avenida, me pregunto cuanto tiempo. Cuanto tiempo, por favor yo no quiero suicidarme. No soy suicida !!!!! Solo quiero una vida maravillosa, con gente que ama, gente que ama... gente que esta contenta y no esta tirando mierda de unos de otros, de todo o de nada... Pero vivo y nimodo.
Mi alma es muy pacifica, mi ser muy sanador para todos, te das cuenta ¿? y para que!? para pintarles para diseñarles para decir eh ahi esta, cumpli mi misión o no?! cuando puedo ser yo misma sin que me digan estas loca... pues ni lo estoy... muchos chavos más jóvenes me ven toda "ñoña" me dijeron un día, es que eres toda buena, bla bla bla....
No somos oscuros, ni nada de eso, nos cala lo oscuro, nos duele profundo cuando acecha, cuando se ve... cuando se siente.
No queremos criticarte, ni enojarnos contigo, ni gritar, ni lo hacemos ... porque estamos aquí, no tengo idea hoy y después aparecerá un muso, un buen amor y sentiré estas ganas de decir, va! vamos, a pintar para que la alegría llegue a todas las casas del mundo de una u otra manera...
Hoy me siento mal en mi mente, mi contradictoria situación nace a raíz de preguntar, ¿que teoría es la más fregona a seguir? ... cual de todas las filosofías, con o sin religión? ... ¿porque hacer esas preguntas? ... pues porque no me encantan las normas sociales, politicas, no las entiendo, no las sigo, cuando lo he hecho ha sido fácil, pero cuando soy artista al 100% no puedo.
"En cualquier caso, lo que parece es que un artista es un ser siempre insatisfecho que, de una u otra manera, acabará teniendo que decidir entre su felicidad y su arte. Y no hay felicidad sin arte, pero sí arte sin felicidad."
ResponderEliminar:::::
a que te refieres en este párrafo Nacho!? me gustaría entenderte !
la misma artista anónima de arriba ;) gracias
Lo he encontrado por casualidad. Pero acierta en muchas cosas. De pequeña solía pensar que nunca sería buena escritora porque siempre había sido suficientemente feliz.
ResponderEliminarSincero y bonito. Sigue actualizando mucho tiempo.
Estimada Cheshire Cat.
ResponderEliminarGracias por entrar, por leer y por comentar. Me alegra ver que todavía pasa alguien por aquí. Intentaré seguir actualizando, aunque ahora sea una vez al mes. E intentaré que siga siendo de vuestro agrado.
Lo demás, lo de ser buen o mal escritor según vida tormentosa o soleada... Digamos que se puede escribir muy bien acerca de rayos y de truenos, pero igualmente bien de luz, calor y calma. O eso me gusta pensar.
Por cierto, he recordado otra entrada más reciente que trata algo parecido. Quizás de forma más cruda: http://www.larealidadatientas.blogspot.com.es/2012/06/algo-remotamente-posible-y.html
Sigue entrando mucho tiempo.
Nacho.